¿Será necesario que pasen cosas drásticas para que nos demos cuenta de lo que tenemos y ser más agradecidos?...
No me esta pasando nada malo, bueno, al menos no a mi. Pero si a alguien muy cercano a quien quiero con toda mi alma. No voy a entrar en detalles porque no hace falta... pero hoy mientras manejaba de regreso a mi oficina, me detuve a pensar en todas las cosas bellas que tengo y que debo agradecer diariamente por tener. Y no me refiero a nada material. Pero hay TANTO que Dios y la vida me dan a diario.
Hoy quiero agradecer...
Por mi tranquilidad espiritual.
Por Adrian,
que llegó a mi vida, con virtudes y defectos, llenándome de amor y alegria y que aún hace que mi corazón brinque dentro de mi pecho. Es mi presente y mi futuro.
Por aquellos que vinieron con él,
y que hoy tambien forman parte de este presente.
Por mi familia,
que no es perfecta, pero al fin y al cabo es mi familia, a quienes amo con locura y a pesar de lo que haya podido suceder en nuestra historia, siempre seremos lo que decia mi papá: los 5 dedos de una mano, que siempre están unidos y que lo que le duele a uno, nos duele a todos.
Por mi salud,
que tampoco es perfecta, pero que gozo de un 98% de ella.
Por mi casa, mi ciudad, mis cosas, mi trabajo...
Por mis amigos!
que son instrumentos de Dios para cuidarme... la familia que puedo elegir.
Por Mi pasado,
porque sin él, hoy no seria quien soy.
Me puse a recordar cosas buenas, escuchando música, observando el sol radiante que hace el dia de hoy, un dia de marzo, que se respira la recién estrenada primavera, con el clima maravilloso que hace en esta época del año... y me transporté a mis últimos 2 veranos, junto a Adrian, disfrutando de la playa, tomando sol, recién mudada a Miami Beach, con tremenda fiebre de estar en el apartamento todo el fin de semana, porque no hacia falta moverse para ningun lado, si todo lo tenia ahí. Las miles de fotos de atardeceres en ese apartamento, abajo en la piscina, o jugando tennis de playa en la arena. Las veces que inventamos ver el amanecer y nos quedamos dormidos, las reuniones y borracheras con amigos y familiares, la cata de vinos! en fin son tantos y tantos los cuentos que estas lineas no me alcanzarian para contarlos.
Recordé mis epocas de rumba con la gorda, y después a levantarme a trabajar! las escapadas con Edna, los inventos con Massiel, el viaje a NYC! las interminables sesiones por MSN Messenger con Johan, hablando cualquier cantidad de cosas y casos, los largos emails entre Rosnel y yo, poniéndonos al tanto de nuestras vidas, tratando siempre de recuperar ese montón de cumpleaños que pasamos la una sin la otra.
Los 6 años en DJ, que fueron como una montaña rusa emocional, a pesar del control de Mike, los chistes estupidos de Eric, los gritos de Yossi y el PMS de Avi, dejaron una huella importante y mucho aprendizaje en mi historia laboral, asi como una gran amistad. Salir por la puerta grande tiene sus recompensas! Mis dias en CUI, bromeando todo el dia con Jose, Luis Carlos y Nicola... chequeando la bolsa de valores y las noticias de Venezuela, viendo el desfile de carros de Julito, escuchando los miles de cuentos de Fausto cuando trabajaba en La Sirena, en su amado Santiago de los Caballeros, y las tonterias de Alvarito, que apenas podía entenderlas. Mis vecinas de oficina, Doña Tina y Tití, con los colombianitos en el warehouse gritando "Ana Nava!" con aquel tono particular que aun puedo escuchar en mis recuerdos, y Jaime, tan pasivo y de pocas palabras. Hasta que llegaba el "coco" (Henry) y alborotaba todo. Y como dejar de mencionar mi época de "rookie" cuando estaba saliendo del cascarón bajo la supervision de Alberto, Carlos y Carolina, en B&B.
Esa era mi vida recien llegada a este pais, cuando todo era mas simple, tenia menos cosas, era mas inmadura y la mitad de mis preocupaciones estaban relacionadas a trivialidades sin importancia. Recordé los ojos de mis perritas, que me miraban con un amor puro y entregado, sin pedir nada a cambio. Tambien mis ultimos años en Venezuela, cuando era apenas una niña que estaba comenzando a vivir.
Mi conclusion es que he sido siempre tan afortunada y feliz, que ese dicho de "cuando era feliz y no lo sabia" pudiera decirlo siempre, pero con la diferencia que SI SE que soy feliz. He pasado por momentos duros, que me han enseñado a ser fuerte, que han llenado mi vida de recuerdos buenos y malos, pero que al final hacen de mi un todo. Por ello tambien soy agradecida.
La vida pasa frente a nuestros ojos sin darnos cuenta, a veces vivimos como autómatas, realizando tareas de manera inconsciente, sin pensar que tenemos tanto pero tanto que muchos otros tal vez no pudieran disfrutar, y nuevamente aclaro que no se trata de lo material, sino de lo bello que es poder agarrar un telefono y llamar a la mamá para decirle "¿que haces?", o bajar 10 pisos y poder tocar el mar, o manejar un par de minutos y reecontrarse con un amigo lejano. Levantarse de la cama y decir "hoy no tengo ganas de salir" y quedarse abrazado a la persona que uno ama, por un dia entero si se quiere!
El estress nos enferma de a poco, y nos embasuramos con alimentos envenenados de hormonas y quimicos que consumimos diariamente quitandonos la salud que tanto nos cuesta mantener. Y mientras tanto, estresados resolvemos la vida de los demas, mientras la nuestra se nos va de las manos. No sabemos imponer un límite para tomar un descanso y decir "ahhh.... gracias! Dios mio... por el dia de hoy! por poder estar aqui, donde quiero estar y con quien quiero estar".
¿Cuantas cosas tienen que suceder para darnos cuenta de lo bien que lo estábamos pasando?...
